Hemos hecho muchos viajes, hemos tenido la suerte de conocer países increíbles, hemos visitado lugares con los que siempre soñamos y hemos descubierto otros que ni imaginábamos. Pero Islandia… Ay, Islandia. Puede ser el viaje que más hemos pensado, preparado, organizado, ¿deseado? Supongo que siempre estamos igual de excitados con el “gran viaje” de cada año y tal vez del previo al siguiente se nos olvida… ¡pero es que estamos tan tan emocionados con Islandia!
Después de la introducción de este post no sé si podemos añadir más motivos en realidad. En nuestra mente Islandia es naturaleza salvaje, paisajes únicos, lugares marcianos y soledad. Nos imaginamos recorriendo carreteras sin cruzarnos con coches y llegando a pueblecitos con 4 casas sin apenas gente por la calle… ¿Acertaremos?
Islandia también es escenario de muchas películas que hemos visto: La vida secreta de Walter Mitty, Batman Begins, Prometheus, Oblivion, Muere otro día (con el incombustible agente 007)… Y sobre todo, acoge las localizaciones correspondientes a “más allá del Muro” en la serie Juego de Tronos, que se ha convertido en el leit motiv de muchos de nuestros friki viajes.
Icelands´s worst kept secret: Game Of Thrones partly filmed in #Iceland. But wait, there is more, so much more..https://t.co/h3Nfs5jt1u pic.twitter.com/KNjVVfXY71
— Inspired by Iceland (@iceland) April 18, 2017
Según leemos en todas partes, el clima en Islandia es como una ruleta rusa y cada día puedes pasar por las 4 estaciones en solo 24 horas. En todo caso, la época más recomendada para poder visitar el mayor número de lugares es verano. Aún así, parece imposible que nos libremos de lluvia, viento e incluso nieve si la cosa se complica. Pero igualmente pinta que también podremos ver el sol (¡por favor!).
Así que el modo cebolla será nuestro uniforme de viaje: capas que ir poniendo y quitando según el momento, con una buena dosis de impermeabilidad para las más exteriores. Y habrá que estar atentos a las predicciones meteorológicas y ajustar los planes según lo que vayamos encontrando.
En este sentido, para poder consultar en todo momento la información necesaria y no llevarnos sorpresas, contaremos una vez más con MyFi Travel. Se trata de un pequeño router (poco más grande que un mechero) que funciona por 4G y al que pueden conectarse hasta 8 dispositivos simultáneamente. Contratas antes del viaje los megas que consideras que vas a necesitar según una tarifa establecida y mientras estás viajando simplemente los consumes a tu ritmo sin miedo a que la factura se te vaya de las manos. Lo usamos muy satisfactoriamente en Croacia y en Islandia repetiremos. Si estás interesado en contratar sus servicios, puedes hacerlo en su página web y además usando nuestro código VAGAMUNDOS10 obtendrás un 10% de descuento.
El clima pesó en nuestra decisión sobre cuándo viajar a Islandia: no tanto por la variación térmica como por las horas de luz, la indisponibilidad de accesos en ciertas épocas a determinados lugares y los fenómenos estacionales. A saber:
Y así hasta el infinito. ¡Menudo rompecabezas! Finalmente optamos por finales de verano porque: en junio ya teníamos otro viaje programado a Croacia; auroras boreales ya vimos en Noruega (aunque tenemos ganísimas de volver a verlas) y encontramos unos vuelos a buen precio (lo que nos lleva al siguiente punto del post).
Llegaremos y saldremos de la isla en avión: vuelo directo con Icelandair de Madrid a Reikiavik que encontramos a coste razonable (270 euros cada uno ida y vuelta), sobre todo teniendo en cuenta que vamos en temporada alta (última semana de agosto y primera de septiembre).
Para moverse por Islandia es prácticamente obligatorio alquilar un coche, de cara a poder recorrerla a tu aire. La archiconocida Ring Road que da la vuelta a la isla es la arteria principal de comunicaciones del país y la guía que todos seguimos en nuestros itinerarios, con los correspondientes desvíos a gusto de cada uno.
A partir de aquí, dos decisiones importantes. Una: ¿en qué sentido recorrer la carretera circular? Nosotros lo haremos en el de las agujas del reloj, para llegar antes al norte y dejar el sur para el final, pensando que a medida que nos adentremos en septiembre habrá mayores probabilidades de que el clima empeore y en la parte septentrional de la isla el buen tiempo aguanta un poco más que en la norteña.
#FelizFinde! Por fin! Y lo empezamos comprando billetes para #Islandia! Ya falta menos! @Icelandair @icelandinspired pic.twitter.com/QRR1TXneL4
— Vagamundos Viajeros (@VagamundosViaje) March 31, 2017
Y dos: ¿qué coche alquilar: turismo o todoterreno? Esta elección no fue fácil y nos causó alguna que otra discusión… La Ring Road y la mayoría de los desvíos habituales son adecuados para un turismo. Pero hay ciertos lugares muy muy apetecibles cuyo acceso implica adentrarse en carreteras de montaña en las que solo está permitido circular con 4×4.
Las carreteras F no solo están sin asfaltar, sino que en algunos casos incluso atraviesan ríos (más o menos pequeños según el caso). No es por tanto para tomar a la ligera… La alternativa para llegar a estos lugares es contratar excursiones con agencias privadas, nada baratas – en realidad nada es barato en este país, de eso ya estamos mentalizados.
Para más inri, los seguros de automóvil a todo riesgo no aplican en Islandia y, nuevamente, son bastante caros si quieres asegurar todo lo posible, cosa que hemos hecho sin dudar. Aún así, ninguno cubre los desperfectos ocasionados por el agua que pueda entrarle al motor vadeando un río en una de esas carreteras de montaña.
Dicho todo esto, ¿qué hemos hecho finalmente? ¡Pues alquilarnos un jeep, claro que sí! (léase con todo el tono irónico posible). Concretamente un Suzuki Grand Vitara que hemos reservado a través de Guide to Iceland, una de nuestras webs de consulta de referencia para organizar el viaje en general. Así que, una vez más, ¡la aventura nos espera! Hemos leído varios blogs de otras parejas que alquilaron 4×4 con sus recomendaciones y nos han animado a intentarlo. Y por supuesto, no perderemos ojo de la web oficial islandesa sobre el estado de las carreteras.
En lo que ya empieza a ser una nueva tradición viajera, tras Nueva Zelanda y Croacia, habrá un tramo del itinerario que lo haremos en barco. Para llegar de la península de Snaefells a los fiordos del Oeste cruzaremos con coche en el ferry Baldur. Además de ahorrarnos un tramo considerable de carretera, podremos ver la costa islandesa desde otra perspectiva.
La corona islandesa nos quita el sueño. Ella y todos los precios que nos lanza a la cara cada vez que consultamos un alojamiento, un alquiler de coche, una excursión… Esos vuelos directos que conseguimos tan económicos nos cegaron, pero viajamos a Islandia en temporada alta y sus precios están en consonancia a esa altura.
1 euro son 124 coronas. Y ya tenemos listo nuestro cálculo mental rápido: 500 coronas, unos 4 euros; 1000 coronas, alrededor de 8 euros; 1200 coronas serán 10 euros. Y así sucesivamente. Realmente pocas coronas “físicas” tocaremos pues en Islandia, según hemos leído, es posible pagarlo prácticamente todo con tarjeta de crédito.
Bien es cierto que al final todo lo que visitaremos son parques y enclaves naturales de entrada gratuita, con lo que en ese sentido lo único a pagar realmente es el transporte, el alojamiento y la comida. ¡Pero es que todo esto está a precio de oro!
Respecto al transporte, gastaremos y mucho: el alquiler de un jeep ya es más alto que el de un coche normal y consume más gasolina (cuyo precio es superior al de España ahora mismo). En alojamiento hemos intentado combinar: lo más “económico” son las habitaciones con baño compartido en granjas o casas, así que iremos alternando éstas con cabañas o dormitorios con aseo privado. Sea como sea, este viaje es en el que mayor presupuesto para alojamiento invertiremos de todos los hechos hasta la fecha. Nos queda ahorrar comprando comida en supermercados, comiendo menús del día en gasolineras y evitando pisar bares y restaurantes. ¡Dieta islandesa!
Cada viaje el proceso de elección de los lugares concretos a visitar es arduo y sacrificado. Pero en este caso ha estado al nivel de un curso intensivo de geografía islandesa.
Finalmente, éste es el recorrido objetivo (aunque sabemos que probablemente habrá que ajustar más de la cuenta cuando estemos allí, sobre la marcha):
Día 1. Partimos directamente hacia la Península de Snaefells para recorrer el Parque Nacional del mismo nombre y conocer el universo en que se inspiró Julio Verne para el inicio de su Viaje al centro de la Tierra. Pasaremos por Stykkisholmur, la principal ciudad de esta zona y con aparición estelar en la película La vida de Walter Mitty.
Día 2. Y desde Stykkisholmur tomaremos un ferry hasta los fiordos del Oeste: menos turísticos que otras partes del país pero con fama de bellos y únicos. El objetivo del día es llegar a ver frailecillos en los Acantilados de Latrabjarg, que albergan una de las mayores colonias de este peculiar ave. El problema es que suelen estar únicamente de mediados de abril a mediados de agosto y nosotros llegaremos aquí el día 28… ¡esperemos que haya suerte!
Cuteness Level: Puffin pic.twitter.com/OL0S9riDaW
— Guide to Iceland (@guidetoiceland) June 14, 2017
Día 3. Continuamos conociendo el territorio occidental islandés. La primera parada serán las cascadas Dynandi, visitaremos la llamada capital de los fiordos del oeste, Ísafjörður, y esperamos ver con nuestros propios ojos un zorro ártico en un centro donde los acogen en Eyrardalur.
Día 4. ¡Llegamos al norte! Conduciremos hasta Akureyri, la segunda ciudad más importante en Islandia tras Reikiavik, con diversas paradas durante el camino y desvío para conocer la península Trollaskagi (la península de los Trolls).
Día 5. Tras dormir en Akureyri, descubriremos la cascada Godafoss (¿como saltarse “la cascada de los dioses”?) y dedicaremos el resto del día al lago Myvatn y todo su área circundante. Es una zona de intensa actividad geotérmica con cráteres, campos de lava, fumarolas, formaciones de lava… ¡Paisajes surrealistas!
Día 6. Aún en el norte, visitaremos nuestro segundo Parque Nacional del viaje: el Jokulsargljufur. El plan es rodear el área natural subiendo por el lado este y bajando por el oeste, con varias paradas y sus correspondientes rutas de trekking: la cascada Dettifoss, el valle Vesturdalur y el cañón Asbyrgi.
Día 7. Uno de los días estrella del viaje y el motivo por el que decidimos alquilar un 4×4: ir por nuestra cuenta hasta Askja. Probaremos así un poco de las auténticas Tierras Altas de Islandia, con vadeos de ríos incluidos, para admirar este inmenso cráter. ¡Esperamos sobrevivir con el jeep de una pieza!
Día 8. Una señora paliza al volante nos daremos esta jornada, recorriendo los fiordos del este (o lo que nos de tiempo de ellos). Con suerte podremos hacer una pequeña ruta por el cañón Stuðlagil.
Día 9. Recta final del viaje: el Sur. Y sus iconos, ¡que son muchos! Como la laguna Jökulsárlón con sus icebergs flotantes o el Parque Nacional Vatnajokull al que intentaremos acceder por Skaftafell con algún trekking.
Día 10. Seguiremos por el sur e intentaremos batir el récord de mayor número de paradas en menor número de kilómetros recorridos: campos de lava, columnas de basalto, zonas de musgo, playas negras en Vik, glaciares, cascadas, acantilados… Todos con nombres impronunciables pero que esperamos conocer (y fotografiar).
Día 11. Si el tiempo acompaña haremos una ruta (o dos) por Landmannalaugar, pero solo podrá ser un trekking corto de un día. La mítica ruta de aquí a Thorsmork, de varias jornadas de caminata, tendrá que esperar a que ¿volvamos a Islandia?
Día 12. ¿De verdad alguien puede ir a Islandia y no ver el Círculo Dorado? No seremos nosotros quienes incumplamos una tradición viajera: el Parque Nacional Thingvellir, con la falla Almannagjá que separa las placas tectónicas de América del Norte y Europa, el Geyser que da nombre a todos los géiseres y la cascada dorada Gullfoss. Y lo que reste del día, a pasarlo en Reikiavik.
Día 13. Nuestro último día completo en Islandia lo dedicaremos a dejarnos querer. El resto del viaje lo hemos organizado nosotros por nuestra cuenta y riesgo. Pero este día haremos una excursión guiada con Guide to Iceland a Langjökull para conocer un glaciar a fondo: por fuera (recorrido en moto de nieve) y por dentro (visita al túnel de hielo). Y por la tarde nos relajaremos en la archiconocida Laguna Azul.
Día 14. Pasaremos la mañana en Reikiavik y a mediodía nos tocará despedirnos de Islandia y coger el vuelo de vuelta a Madrid.
Hemos consultado y comparado información y recomendaciones de la Lonely Planet, diversos blogs, webs especializadas en Islandia, varios foros… ¡Nunca habíamos leído tanto para organizar un viaje! Aquí algunos de los blogs de referencia principales:
Como siempre, os iremos contando nuestro viaje día a día a través de las redes sociales y a la vuelta, con todo lujo de detalles en el blog. ¡Islandia, allá vamos!
Si estás planteándote viajar a Islandia y quieres hacerlo seguro, recuerda que te ofrecemos un estupendo descuento en la contratación de tu seguro de viaje a través de nuestro blog
Qué tengáis muy buen viaje!! En el blog tenemos escrito muchas cosas sobre Islandia que os pueden ser útiles. La primera vez que fuimos recorrimos Islandia en furgo para ahorrar en los alojamientos. El país es una pasada… Volvimos en invierno para ver las auroras boreales y acabamos dando la vuelta a la isla otra vez! Islandia engancha mucho y una vez la visitas, solo piensas en volver 😀 😀 ¡Disfrutad mucho!
Genial, muchas gracias, os leeremos! Todo el mundo habla (y escribe) tantas maravillas sobre Islandia que estamos emocionadísimos, con unas ganas tremendas de llegar y empezar a ver con nuestros propios ojos todo lo que nos vais contando…
Hola chicos!
No habíamos visto vuestra mención! Qué emoción!! Mil gracias! Un honor haberos convencido, por lo que veo no somos los únicos a los que se nos va la olla con Islandia 😄
Enhorabuena por el blog y por este cacho post!
Ey! Jajajaja, pues no ha pasado tiempo ni nada!!! Bueno, más vale tarde que nunca 😉
De todos los viajes a Islandia que hemos visto este año, el que más nos ha gustado (con diferencia) es el vuestro!
La ruta es ideal, y los fotones que habéis hecho… os ha quedado todo redondo! Estamos deseando ver más 😉
Un besote
Ala, muchísimas gracias, qué ilusión!!! Ya iremos contando en el blog el detalle del viaje ahora que hemos vuelto, poco a poco, y sacando más fotos 😉