Vagamundos Viajeros

Si algo tiene el otoño es que los bosques y montes sacan sus mejores colores, en competencia única con los de la primavera. Como somos alérgicos al polen, personalmente, es el mejor momento para nuestras escapadas y rutas a la naturaleza: ni problemas de estornudos ni demasiado frío ni demasiado calor. Y sin embargo, apenas habíamos aprovechado esta estación para acercarnos a la Sierra Norte de Madrid, área famosa por lo bonita que se pone precisamente en otoño. ¡Eso había que solucionarlo!

La elegida fue la Sierra del Rincón, en el noreste de la Comunidad madrileña, en la frontera entre ésta y la provincia de Guadalajara (donde también puedes visitar el hayedo de Tejera Negra) y Reserva de la Biosfera desde 2005. Son 15.000 hectáreas de montañas, bosques y valles, con bonitos paisajes repartidos entre 5 municipios: La Hiruela, Horcajuelo de la Sierra, Montejo de la Sierra, Prádena del Rincón y Puebla de la Sierra.

El título de Reserva de la Biosfera se concede a aquellas áreas en que existe una relación equilibrada entre sus habitantes y la naturaleza, plasmada en el desarrollo de actividades económicas sostenibles y en la preservación de los valores culturales de sus poblaciones. Estas características se dan en la Sierra del Rincón: la variedad de sus paisajes, la ausencia de grandes núcleos urbanos y el aprovechamiento humano del ecosistema sin dañarlo (huertos frutales, colmenas tradicionales, molinos de agua, etc) han favorecido el nombramiento. En España hay 52 lugares Reserva de la Biosfera (puedes consultarlos todos aquí).

Para poder conocer la Sierra del Rincón a pie, se han recuperado y señalizado 20 rutas que forman las “Sendas Verdes”. Cuatro de ellas parten del pueblo de La Hiruela, con una extensión que va desde los 1,5 hasta los 5 kilómetros cada una. Se pueden realizar individualmente, en lo que suponen cortos paseos, o bien combinar varias para alargar el trekking, como hicimos nosotros.

La Hiruela es uno de los pueblos más bonitos y mejor conservados de la Comunidad de Madrid. Sus calles apenas han cambiado desde el siglo XVIII. Desde la entrada al municipio hasta la plaza principal donde está la iglesia de San Miguel puedes caminar por dos vías paralelas en las que observar sus típicas casas, construidas en piedra, adobe y madera de roble (materiales que obtenían de la propia Sierra).

El cultivo de árboles frutales ha sido clave en este pueblo desde hace siglos, fundamentalmente del “pero real”, una variedad local de manzana muy apreciada por su sabor. Curiosamente los perales no eran habituales en La Hiruela, pero hace 200 años a un vecino se le ocurrió plantar uno y su crecimiento fue tal que animó a extender la plantación de este tipo de árboles por toda la zona. Aún se conserva este primer peral, a la entrada del pueblo, y alcanza los 15 metros de altura, lo que le convierte en el más alto de la Comunidad de Madrid y uno de los mayores de toda España.

Como el centro urbano del municipio está cerrado al tráfico, debes aparcar el coche en un parking gratuito previo, desde allí entrar y caminar por La Hiruela a pie y elegir qué senda recorrer, pues todas empiezan en el propio pueblo.

De molino a molino. 5 kilómetros. Personalmente nos pareció la senda más bonita. Los habitantes de La Hiruela seguían este camino para llegar a El Cardoso de la Sierra. Atraviesa un magnífico robledal, continúa por la ribera del río Jarama, pasa junto a dos molinos, el de Juan Bravo y el de La Hiruela, y culmina en una tranquila área recreativa desde la que también es fácil llegar hasta un antiguo colmenar tradicional y enlazar con la siguiente senda.

Los oficios de la vida. 2,7 kilómetros. Permite conocer los sitios que ejemplifican las que fueran las claves de sustento económico de La Hiruela: el molino harinero, el colmenar tradicional y la carbonera. En el colmenar, cuya antigüedad dicen que data de más de 200 años, es muy curioso ver las colmenas tradicionales, realizadas en troncos de roble huecos. También interesante es la recreación de una antigua carbonera vegetal de roble: La Hiruela vendía carbón hasta 1950 a los municipios de alrededor e incluso a la capital madrileña. Todo con sus correspondientes paneles informativos, muy de agradecer.

Senda de la Fuente Lugar. 1,5 kilómetros. Corto recorrido pero muy aprovechado, por la abundancia y variedad de impresionantes árboles: cerezos, avellanos, abedules… La Fuente Lugar que da nombre a la senda, es un conjunto de lavaderos y pilas, ahora en desuso, donde antaño las vecinas de La Hiruela lavaban en invierno, dado que era un punto soleado y menos frío.

Senda por las Eras y la Pila de Riego. 2,7 kilómetros. Es la única que no llegamos a pisar. Permite observar las principales especies de matorral de la zona, el cerezo de La Hiruela y unas bonitas vistas sobre el propio pueblo de La Hiruela, el valle del Jarama y El Cardoso de la Sierra.

Nosotros hicimos una ruta que combinaba fragmentos de las 3 primeras sendas descritas, muy fáciles de seguir por las continuas señalizaciones, pero sumando también un tramo que se adentraba más en la sierra.

• Partiendo de la plaza de la iglesia en La Hiruela, en primer lugar, seguimos el camino “De Molino a Molino” al completo.

• Al finalizar éste, desde el área recreativa del Molino de La Hiruela, enganchamos con parte de la senda “Los oficios de la vida”.
• Nos mantuvimos en ésta hasta alcanzar la carbonera y desde allí, dejando ya el marcado oficial, seguimos adelante en el camino de la Dehesa y atravesamos un impresionante robledal donde nos detuvimos un buen rato a hacer fotos.

• Siempre manteniendo ese camino, continuamos ascendiendo hasta alcanzar el Collado Hondo, la cota más alta del recorrido a 1367 metros, y con unas estupendas vistas de toda la sierra.

• Dejamos el Collado Hondo por una senda descendente un tanto escondida (en este punto Wikiloc vino al rescate). Su inicio estaba indicado por un un hito y nos condujo hasta una portilla que daba paso de nuevo a una pista entre árboles.
• Continuamos por ésta, con La Hiruela ya a la vista, cruzamos la carretera y volvimos a un último trazado oficial, esta vez el de “La Senda de Fuente Lugar”.
• Ya sin opción a pérdida, siguiendo las indicaciones de este camino, atravesamos una zona maravillosa de bosques junto al río, con mucha más vegetación y humedad, pasamos por el área de lavaderos que da nombre a la senda, y casi sin darnos cuenta nos encontramos de regreso en La Hiruela.

Nosotros pudimos seguir la ruta sin problemas con Wikiloc y la disfrutamos muchísimo. No sabemos cómo estará la Sierra del Rincón en otras épocas del año porque ésta fue nuestra primera vez allí, pero desde luego en otoño estaba impresionante. No es de extrañar teniendo en cuenta que gran parte de su masa arbórea la componen robles, pinos y hayas. ¿Y tú? ¿Ya conoces esta zona? ¿Nos recomiendas alguna otra ruta?

El punto turístico más destacado de la Sierra del Rincón es sin duda el Hayedo de Montejo. Perteneciente al municipio de Montejo de la Sierra, se trata de un bosque de hayas de 250 hectáreas. Además de esta especie de árbol también se pueden ver robles, cerezos, abedules… Es muy popular y visitado, debido a que el hayedo es más propio de lugares centroeuropeos que de cotas tan meriodionales, si bien no es el único que existe en estas latitudes (también está por ejemplo el de la Pedrosa en Segovia). Es un Espacio Natural Protegido, con lo que solo se puede conocer en rutas guiadas gratuitas con número muy limitado de asistentes y para las que hay que reservar previamente. Cada 15 días en esta web salen disponibles las plazas para los horarios de las siguientes 2 semanas y se permite reservar un máximo de 5 plazas a la vez. Desgracidamente nunca hemos llegado a tiempo y no hemos logrado aún reservar y, por tanto, ver este hayedo con nuestros propios ojos…

Para finalizar, te dejamos el podcast de “Viajar del cuento” en que hablamos de muchos más planes para hacer en otoño en Madrid: