Vagamundos Viajeros

¿Alguna vez has oído hablar de Velika Planina? Igual te suena a localización de la serie “Vikingos”. Pero está bastante más al sur de esas tierras noruegas y sus habitantes no eran guerreros sino simples pastores. Velika Planina es una bella zona de montaña, a  1.600 metros de altura, en Eslovenia, un pequeño país en la zona norte de los Balcanes. Y allí, en amplias praderas verdes rodeadas de los altos picos de los Alpes, se encuentra el pueblo de pastores más grande de Europa. 

Velika Planina significa, literalmente, “gran montaña” y se extiende por 557 hectáreas. El pueblo lo conforman 140 cabañas. Son construcciones bajas, de madera, con enormes y llamativos tejados, con una arquitectura muy característica. Y su alrededor campan a sus anchas hermosas vacas pardas.

Velika Planina fue de nuestros sitios favoritos de Eslovenia y creemos que debe ser parada obligada en cualquier itinerario por el país. Pero, ¿cómo llegar? ¿Qué hacer allí? ¡Te lo contamos!

Eslovenia es uno de los países que recorrimos en nuestro road trip con perro y con bebé por Europa. Llegamos en coche desde el norte de Italia y allí pasamos ocho días (aquí el itinerario completo). Como contamos en la guía de alojamientos de este viaje, dividimos nuestra estancia en Eslovenia en dos: 4 noches en Liubliana y 4 noches en Bled. Desde ambos puntos nos desplazamos en coche para recorrer los sitios de interés. En este caso, a Velika Planina llegamos desde Liubliana. Allí nos alojamos en el Central Apartment Anita: un piso grande, de 49 metros cuadrados, bien equipado y bastante céntrico, con parking y por 461 € (29 € más por la cuna y 38 € extra por el perro).

Puedes alojarte en el mismo Velika Planina, en alguna de las casas de pastores, hoy reconvertidas en alojamientos turísticos. Pero lo más probable es que llegues allí desde la cercana Liubliana, siendo la capital eslovena una buena base desde la que explorar muchos otros sitios de interés próximo.

Así fue nuestro caso y en apenas 50 minutos en coche llegamos desde Liubliana hasta el teleférico con el que subes a Velika Planina. Sí, el único transporte para subir hasta este pueblo de montaña es el teleférico, salvo que prefieras llegar a pie, claro. Incluso si eliges alojarte en Velika Planina deberás hacer uso de este teleférico. El coste es de 19 € por adulto ida y vuelta; los perros son admitidos con bozal y correa por 5 € y los niños hasta 7 años no pagan. La entrada se puede reservar online sin fecha y tiene una vigencia de 14 días desde el momento de la compra.

El teleférico te deja cerca de Velika Planina pero aún no en el mismo pueblo. Para alcanzarlo debes tomar un telesilla, incluido en el precio del teleférico, que salva los últimos metros hasta el pueblo de pastores. Desgraciadamente estaba en obras cuando fuimos nosotros así que nos tocó subir a pie (unos 30 minutos a paso lento, con una pendiente considerable). Al menos el primer sitio que encuentras en Velika Planina y signo de que has culminado tu trayecto es un bar restaurante con bonitas vistas e ideal para descansar tras el ascenso.

¿Y qué hacer a partir de aquí? En primer lugar debes caminar en torno a las cabañas tradicionales (y a las tranquilas vacas) y observarlas de cerca, son realmente bonitas. Existe una ruta señalizada que recorre el pueblo con varias paradas indicadas e información muy interesante en los paneles. Así llegas por ejemplo a la original capilla de madera de Santa María de las Nieves.

Pero es que además Velika Planina es un gran punto de partida para hacer rutas, a pie o en bici, más cortas o más largas, que llevan hasta otras áreas cercanas igualmente bellas. En nuestro caso hicimos simplemente el paseo por el pueblo porque la subida sin telesilla, porteando a un bebé a mayores, nos robó las fuerzas para mucho más.

También debes disfrutar de la gastronomía local en alguno de los restaurantes que han acomodado en las casas típicas de pastores. Igual que otras, como mencionábamos, se han reconvertido en alojamientos. No obstante algunas cabañas sí mantienen su uso original.

Volviendo al tema gastro, es muy recomendable probar en Velika Planina el menú típico de los pastores: leche agria, pan, polenta y queso. Personalmente lo hicimos en Pastirski Stan Gradišekovih (aparece en Google Maps con este nombre), donde además hacen un estupendo pastel de manzana.

A pesar de que la estampa de Velika Planina cubierto de nieve es muy bella, por lo que hemos podido ver en Internet, lo suyo es ir en primavera o verano, cuando los pastores están allí de facto (en invierno abandonan con sus rebaños esos lares).

¿Te hemos convencido entonces para incluir Velika Planina en tu recorrido por Eslovenia?

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