Teníamos claro que nuestro primer viaje de varios días con bebé y con perro (felices los 4) debía ser un road trip: con el coche bien a tope de bultos y bolsas como padres primerizos de manual. Y, por tanto, tenía que ser un destino nacional. Pero desde Madrid esto abarca muchas posibilidades (ventajas de la centralidad geográfica de la capital). La fecha elegida era Semana Santa, con Alaia ya de 4 meses. Dados los condicionantes de la escapada (con bebé, con perro, temporada alta) nuestras opciones de fueron reduciendo hasta concluir en la Alpujarra de Granada.

Y es que habíamos estado varias veces en Granada capital, pero ninguna en el resto de la provincia. Las imágenes de los pueblos alpujarreños, varios incluidos en la Asociación de Pueblos Más Bonitos de España, como Bubion, Trévelez, Pampaneira y Capileira, nos daban muchas ganas de conocerlos. Y la proximidad a Sierra Nevada era un gran aliciente. Dicho y hecho. A la Alpujarra hemos de ir.

La Alpujarra es un valle comprendido entre Sierra Nevada, al norte, la costa mediterránea, al sur, y Almería, al oeste. Su nombre deriva del término árabe al-bugscharra, que significa “Tierra de hierba” o “Tierra de pastos”. Y este pasado se refleja perfectamente a día de hoy en los cultivos en terrazas, las acequias, los pueblos bien integrados en el paisaje y la gastronomía. Es una región tradicional, rica en agua, de pueblos blancos con una arquitectura muy característica: calles comunicadas por “tinaos” (pasadizos) y casas encaladas con tejados planos, “terraos”, coronados por chimeneas altas con sus “sombreros” de pizarra . Casi 40 pequeños municipios en total, muchos de apenas un centenar de habitantes, componen la Alpujarra siendo Órgiva su capital.

Torre de la iglesia y típica chimenea de la arquitectura alpujarreña
Torre de la iglesia y típica chimenea de la arquitectura alpujarreña

El recorrido más habitual de la Alpujarra empieza por la A-348 con los dos municipios más grandes de la zona: Lanjarón, conocido por su famosa agua y a solo 45 kilómetros de Granada capital, y Órgiva, capital de la región. Allí tomas la A-4132 y empiezan las curvas, literales y figuradas (no olvidemos que estamos en alta montaña). La primera parada es Soportújar, el pueblo de las brujas. Le sigue Pampaneira, reconocido como el más bello de la zona y el primero del Barranco de Poqueira. Debes adentrarte en éste, vía la A-4129, para conocer también Bubión y Capileira. De vuelta a Pampaneira sigues por la A-4132 hasta Pitres, Pórtugos y Trevélez, el que está a mayor altitud en la zona. Cerca de éste encuentras el desvío a la A-4130, necesaria para conocer el extremo más occidental de la Alpujarra, al que no nos dio tiempo a llegar desgraciadamente: Bérchules, Yegen y Válor.

Obviamente si conduces tu propio coche tienes una mayor libertad para conocer todos estos municipios a tu ritmo e incluso intercalar alguna ruta de senderismo, pues hay muchísimas opciones en torno a cada pueblo al estar en Sierra Nevada. No obstante, hay muchos servicios de autobús que permiten llegar desde Granada capital y que cubren los desplazamientos entre las principales localidades de la Alpujarra. Eso sí, con horarios limitados: por ejemplo hay 3 buses diarios que conectan Pampaneira, Bubión y Capileira.

Calles del Barrio Medio de Trevélez, en la Alpujarra de Granada
Calles del Barrio Medio de Trevélez

La gastronomía siempre es parte primordial en nuestros viajes y no lo iba a ser menos en esta ocasión, dado que esta zona cuenta con muchos platos típicos, así que probarlos era también objetivo de la escapada. El principal es el plato alpujarreño, compuesto por huevos fritos, papas a lo pobre, lomo de orza, jamón y morcilla (nada ligero). También las migas, las gachas, el pimentón de bacalao, el choto al ajillo (cabrito), la asadura (de cerdo) aliñá, el puchero de hinojos (potaje de garbanzos, alubias blancas, carnes y verduras) o las tortillas de collejas (un tipo de hierba que ya descubrimos en Priego de Córdoba). Hay que destacar así mismo el jamón de Trévelez, reconocido con Indicación Geográfica Protegida (IGP) por las caracerísticas climáticas de la Alpujarra en cuanto a altitud, temperatura y humedad en que se produce. Y si hablamos de dulces, tenemos, entre otros, los roscos fritos, la torta de higos secos y los soplillos.

Durante nuestros 4 días y sus noches en la Alpujarra tomamos como base Capileira porque allí encontramos el alojamiento que se ajustaba a nuestras necesidades (que no eran pocas). Que fuese un apartamento, con disponibilidad de cuna, facilidad para aparcar, que admitiese mascotas y a un precio razonable pese a ser Semana Santa. Lo encontramos en Apartamentos Rurales Las Chimeneas: 4 noches, apartamento de 1 dormitorio de 34 metros cuadrados, 304 euros en total. El apartamento era muy amplio, con bañera, cocina equipada y un bonito balcón con vistas. No tienen aparcamiento propio pero están frente a uno de los parkings públicos más grandes de Capileira e incluso es posible dejar el coche en la misma calle del apartamento.

Mucho que ver y hacer en este valle y, como siempre, tiempo muy limitado para ello. Sobre todo teniendo en cuenta que viajar con un bebé de 4 meses ralentiza y limita las actividades del día. Con todo, en este artículo recogemos, en grandes titulares, lo que pudimos descubrir en la Alpujarra.

Lanjarón

La empresa que comercializa el agua de Lanjarón le puso su nombre a la marca así que ahora todos asociamos, muy corectamente, este pueblo con manantiales y fuentes, incluso sin haber estado en él. Ya en el siglo XIX atrajo al turismo de la época por las propiedades medicinales de sus aguas que propiciaron la construcción de su balneario, hoy el más importante de Andalucía. Para probar ese agua tienes muchas fuentes en sus calles, adornadas además con frases de poemas, muchas del granadino García Lorca.

Balneario de Lanjarón, en la Alpujarra de Granada
Balneario de Lanjarón

Pero ¿qué ver concretamente en Lanjarón? El barrio Hondillo es el imprescindible a recorrer. De origen árabe y característico de la arquitectura alpujarreña, allí puedes ver tinaos, calles estrechas, patios con fuentes y casas bajas. Todo adornado con muchísimas macetas y plantas, realmente bonito y florido.

En la parte más moderna destacan la Parroquia de Nuestra Señora de la Encarnación, del siglo XVII y estilo mudéjar, y la Plaza de la Constitución, donde están el Ayuntamiento y la enorme Fuente Viva. También nos gustó mucho la placeta de Santa Ana.

A unos 400 metros de Lanjarón está su castillo (o lo que queda de él). Era de origen árabe, del siglo XIII, pero todo indica que los restos actuales son del XVI, de obra castellana tras la reconquista, y que son tres veces más pequeños que la estructura original árabe. Es de acceso gratuito. Puedes llegar en un corto paseo desde el pueblo, bien por la carretera, bien desde el Parque El Salado (hay señales). Nosotros fuimos desde el Salado, que es un camino más agreste entre naturaleza, ideal con perro pero descartado si vas con carrito de bebé, y volvimos por la carretera, que es un trayecto más corto.

Es el primero de los municipios situados en el barranco de Poqueira y, junto a varios más de esta zona, forma parte de la lista oficial de los Pueblos Más Bonitos de España. Como otras localidades de esta región su mayor influencia la vivió en época nazarí, debido al comercio de la seda.

Como en todos los pueblos de la Alpujarra, la panorámica del resto del valle desde cada uno de ellos es digna de admirar, así que los miradores abundan. En Lanjarón está el Mirador de La Cañona que, además de vistas, tiene una pieza de artillería de la Guerra de la Independencia que le da el nombre.

Por último, si buscas un local diferente donde tomar algo o comer informal, te recomendamos el centro cultural Fábrica de Lanjarón, al final del barrio Hondillo.

Órgiva

A pesar de que, como el resto de pueblos de la Alpujarra, fueron los árabes los que lo situaron en el mapa, Órgiva tuvo ocupación humana muchos siglos antes. Así lo atestiguan los yacimientos arqueológicos que conserva, como la Necrópolis de El Pago, de época tardo romana (siglos V a VII). Durante el reinado nazarí tuvo bastante importancia y en 1492 fue cedida por los Reyes Católicos a Boabdil como lugar de retiro.

De su patrimonio cultural destaca la Parroquia de Nuestra Señora de la Expectación, antigua mezquita reconvertida tras la reconquista, con sus altas torres visibles desde casi cualquier punto de Órgiva, y la Casa Castillo de los Condes de Sástago, actual Ayuntamiento. También hay muchísimas fuentes y lavaderos e incluso antiguos molinos y almazaras.

Parroquia de Nuestra Señora de la Expectación en Órgiva, Alpujarra de Granada
Parroquia de Nuestra Señora de la Expectación en Órgiva

Lo más bonito de Órgiva es el Barrio Alto, con la arquitectura tradicional alpujarreña y montones de macetas y flores. También es interesante pasar por la Plaza de la Alpujarra, donde puedes ver dos tinaos. Como curiosidad, junto a esta plaza hay otra placeta, detrás de la Biblioteca, con varias esculturas de El Quijote, en honor a la amplia colección de ediciones de esta novela que guarda la Biblioteca de Órgiva en el “Aula Cervantina Agustín Martín Zaragoza”.

Si como nosotros viajas a la Alpujarra en Semana Santa podrás disfrutar como extras de muchas actividades y eventos especiales con motivo de esta festividad tradicional. Por ejemplo en Órviga se celebra la Feria ‘Hecho en la Alpujarra’ con productos artesanales y agroalimentarios típicos. En Bubión el Viernes Santo a las 15.00 horas puedes pedir 3 favores en la Iglesia al Señor en el momento de su expiración. Y en Lanjarón se celebran procesiones desde el miércoles por la noche hasta el Sábado Santo.

Soportújar

El pueblo de las brujas debe su sobrenombre a la leyenda de que hechiceros y brujas vivían aquí. Leyenda muy bien aprovechada por Soportújar que ha instalado numerosas representaciones artísticas en sus calles inspiradas en esta temática de la brujería. ¡Es como ir a un parque de atracciones brujeril! Por tanto es un destino ideal para viajar con niños aunque para todos es muy divertido recorrer sus calles buscando estos elementos: la Cabeza de la Bruja Baba Yaga, la Cueva del Ojo de la Bruja, el Puente Encantado, la Fuente de las Brujas, la Casa de Baba Yaga, el Mirador del Embrujo, la Escoba Mágica, la Fuente del Dragón… Si quieres conocer en detalle todo lo que puedes ver en Soportújar, no te pierdas nuestro post.

Casa de la Bruja Baba Yaga en Soportújar, Granada
Casa de la Bruja Baba Yaga en Soportújar

Paseando en busca de estos lugares mágicos también apreciarás los elementos típicos de la arquitectura de la Alpujarra: no en vano el nombre de Soportújar deriva de “soportal”, por la gran cantidad de soportales o “tinaos” que hay en el pueblo.

Por último, cabe destacar que es el punto de partida para llegar hasta O Sel Ling, un centro de meditación budista ubicado a 1.600 metros de altura. Creado en 1980 y visitado por el mismísimo Dalai Lama que le dio su nombre de O Sel Ling, “lugar de luz clara”, se puede visitar gratis en horario de tarde o puedes unirte a sus retiros y talleres.

Pampaneira

Puerta abierta a la Alpujarra alpina.
Balcón a la Granada marinera.
Hacia arriba, las nieves del Veleda.
Al horizonte, el mar de Salobreña.
¡Viajero de la ruta alarconiana!
Caminante que buscas la belleza,
el sol, la luz, el aire y los castaños,
el agua cristalina del Poqueira.
Para ti, peregrino en sus praderas,
levanta al cielo lanzas Pampaneira

Cerámica Árabe y Azujelera San Isidro al Valle del Poqueira

El primero de los pueblos del barranco del Poqueira es oficialmente uno de los Pueblos Más Bonitos de España y probablemente el más famoso y visitado de la Alpujarra. La Plaza de la Libertad es el epicentro del municipio. Aquí se ecuentra la Iglesia Parroquial de la Santa Cruz, del siglo XVI y estilo mudéjar. También en esta plaza encuentras muchos bares, restaurantes y terrazas. Nosotros estuvimos en la de Café Europa y damos fe de que sus bocadillos están muy buenos y de que son atentos en el servicio, incluso estando a tope de clientes.

De esta plaza parten las famosas calles empinadas y estrechas con acequias centrales y casas blancas que probablemente hayas visto previamente en fotografías por Internet: el Silencio, el Real, la Verónica… No pillamos todas con agua, por desgracia, pero las que vimos eran realmente bonitas.

Calles de Pampaneira, en la Alpujarra de Granada
Calles de Pampaneira

También conserva telares y tiendas de artesanía local donde puedes comprar las coloridas y típicas jarapas (telares hechos a base de harapos o ropa usada). Y otra tradición de Pampaneira: la chocolatera. Ahí está Abuela Ili chocolates que presume de ser la primera chocolatería artesana de Andalucía y ya tiene sucursales en la vecina Capileira e incluso en Granada capital.

Por último, si quieres disfrutar de las mejores vistas a Sierra Nevada, debes dirigirte al Paseo de García Lorca, con textos del poeta inscritos en numerosas placas y fuentes.

Paseo de García Lorca en Pampaneira, Alpujarra de Granada
Paseo de García Lorca en Pampaneira

Bubión

¡Otro que está en la Asociación de los Pueblos Más Bonitos de España y en el barranco del Poqueira! Aunque es mucho más pequeño y tranquilo que Pampaneira. Incluso en temporada alta cuando el anterior está hasta arriba de turistas, Bubión permanece en calma (muy de agradecer).

Creado por los árabes en el siglo VIII, Bubión fue muy importante durante la dinastía nazarí entre los siglos XII y XV. El epicentro del pueblo es la Plaza del Ayuntamiento donde puedes ver la Iglesia de la Virgen del Rosario, del siglo XVI; el Museo Casa Alpujarreña, para descubrir la forma de vida tradicional en esta zona; un mirador con buenas vistas; y un par de bares y terrazas muy agradables. No dejes de pasear por sus empinadas calles con las características casas encaladas, los tinaos y las numerosas fuentes que irás encontrando.

La torre de la Iglesia de la Virgen del Rosario en Bubión tiene su propia leyenda, la de la mora cautiva. El espíritu de la bella mora Zecilia vaga desde hace siglos aquí tras ser encerrada hace 500 años por su amor por el cristiano Diego de Enciso. Y hay quien dice que aún oye sus lloros y lamentos al pasar cerca de la torre…

Torre de la Iglesia de la Virgen del Rosario en Bubión, Alpujarra de Granada
Torre de la Iglesia de la Virgen del Rosario en Bubión

Capileira

Literalmente su nombre significa “Cabellera de las Cumbres”, por ser el municipio más alto del barranco de Poqueira. También es uno de los Pueblos Más Bonitos de España. Y como los anteriores, existe desde la dominación árabe de la Península. Su mayor auge, no obstante, se produjo en los siglos XVI y XVII debido a la actividad minera y a la producción de seda.

La principal actividad en Capileira es pasear por sus bonitas calles, entre esas casas tan características de la Alpujarra con sus terraos y chimeneas, y admirar las fantásticas vistas del entorno natural alrededor. Por el camino podrás disfrutar de algunos monumentos destacados como la Parroquia de Santa María de la Cabeza, el lavadero en la Plaza Vieja y el mirador del Perchel.

Parroquia de Santa María de la Cabeza en Capileira, Alpujarra de Granada
Parroquia de Santa María de la Cabeza en Capileira

Dado que nos alojamos en Capileira probamos su oferta hostelera por encima de la de otras localidades de la Alpujarra. Para desayunar bueno y barato (una tostada enorme, 2 €) recomendamos el Bar Moraima. Aunque si eres de dulce, encontrarás más opciones en el Café Delicias. En la Bodega La Alacena puedes degustar y comprar (también es tienda) productos autóctonos como el queso, la miel y el vino. El Corral del Castaño sorprende: recetas muy originales, casi gourmet, como croquetas de rabo de toro con ali oli de chocolate. Y en La Pizzería, frente a la mencionada parroquia, podrás probar muchos platos de la zona, incluso adaptados al formato pizza, como la alpujarreña, que es básicamente el tradicional plato alpujarreño volcado en una pizza (huevos fritos, papas a lo pobre, lomo de orza, jamón y morcilla). Todos ellos cuentan con terraza en la que puedes estar con tu perro.

Si el senderismo es lo tuyo puedes conocer estos 3 pueblos del barranco de Poqueira, Pampaneira, Bubión y Capileira, a pie, como te contamos en este post. En temporada alta, cuando es realmente difícil encontrar aparcamiento, supone muy buena opción, pues solo deberás dejar el coche en Pampaneira o Capileira y conocerás los 3 municipios andando. Puedes hacer una ruta circular, más dura, de 10 kilómetros y unas 4 horas, o lineal, yendo y viniendo por el mismo trayecto, unos 7 kilómetros, 3 horas. En ambos casos, no obstante, hay un desnivel de 700 metros. Si aparcas en Pampaneira, primero subirás hasta Capileira pasando por Bubión y luego desharás el camino cuesta abajo; al contrario si partes de Capileira. A cambio, obtienes grandes vistas de los municipios del barranco y de Sierra Nevada, además de recorrerlos estos también. Nosotros hicimos el trekking lineal, porteando y con perro, y merece mucho la pena.

Pampaneira, Bubión y Capileira, los 3 pueblos del barranco de Poqueira en la Alpujarra de Granada
Pampaneira, Bubión y Capileira, los 3 pueblos del barranco de Poqueira en la Alpujarra de Granada

Pitres

Es la capital de La Taha, municipio en el centro geográfico de la Alpujarra que componen 6 pequeños pueblos: Capilerilla, Mecina, Mecinilla, Fondales, Ferreirola y Atalbéitar, además de Pitres. El Ayuntamiento, el centro de salud y demás servicios principales de La Taha están aquí. Partiendo de la central Plaza del Ayuntamiento puedes ver la Iglesia Parroquial de San Roque, mudéjar; pasear por las calles tradicionales con tinaos, como la Real; y degustar la gastronomía local e incluso disfrutar de un concierto improvisado en la terraza del restaurante El Faro.

Pitres, en la Alpujarra de Granada
Pitres

Pero lo más curioso de Pitres es que, en plena Sierra Nevada como está, tiene puerto de mar. ¿Cómo es posible? En el siglo XIX un candidato a las Cortes en campaña electoral preguntó qué querían a los vecinos de Pitres y estos solicitaron un puerto marítimo. Ni corto ni perezoso, el político se lo concedió, eso sí, a cambio de que los pitreños trajesen ellos mismos el agua desde la costa de Motril. Obviamente nunca lo hicieron pero desde entonces quedó la cantinela popular de que Pitres tiene puerto de mar. Por eso hay un Paseo Marítimo, una calle del Puerto e incluso una cofradía de pescadores. Y, para completar la anécdota, Pitres está hermanado con Motril.

Pórtugos

Las propiedades medicinales de las aguas en el paraje natural de Fuente Agria lo convierten en el lugar más icónico de este pueblo y uno de los más curiosos de ver en toda la Alpujarra. Está a las afueras de Pórtugos, perfectamente señalizado desde la carretera, imperdible (pasando el pueblo si vienes de Lanjarón, antes de llegar al mismo si conduces desde Trevélez).

Aquí se encuentra la Ermita de la Virgen de las Angustias y, junto a ella, un área recreativa con mesas de merendero en torno a la Fuente Agria. Ésta, con varios caños teñidos de naranja por el óxido, vierte agua ferruginosa, con olor y sabor a hierro. Personalmente no me gustó nada, recuerda al agua con gas, pero había que probarla. Descendiendo por una escalera desde la fuente llegas a la cascada del Chorrerón, realmente llamativa al haber tintado también de naranja todo el entorno.

Fuente Agria de Pórtugos, en la Alpujarra de GranadaFuente Agria de Pórtugos, en la Alpujarra de Granada
Fuente Agria de Pórtugos

Trevélez

Con éste cerramos la lista de los Pueblos Más Bonitos de España que hay en Granada – nada mal esta concentración que tiene la Alpujarra de municipios oficialmente bellos. Es, a nuestro juicio, sin embargo, el menos merecedor de este título y no es comparable a los anteriormente mencionados de Pampaneira, Bubión y Capileira.

Su historia sí es muy interesante: poblado desde el neolítico, de origen romano (su nombre procede del término latino inter-valles), su conformación actual deriva de la ocupación árabe. Y lo más llamativo es su ubicación: es uno de los pueblos más altos de España, con una altitud oficial de 1.480 metros, si bien su barrio Alto alcanza los 1.600. Está de hecho prácticamente en las faldas del Mulhacén, el pico más elevado de la Península, como “desparramado” a lo largo de la ladera. Por eso mismo se compone de los barrios Bajo, Medio y Alto (así, sin complicaciones) y lo suyo es pasearlos, de abajo arriba y de arriba abajo, con bien de cuestas sin parar.

En el barrio Bajo puedes ver el río Trévelez, donde se forman unas piscinas naturales muy aprovechadas en verano, y la Iglesia Parroquial de San Benito, del siglo XVIII. Aquí llegan los autobuses de excursiones y están la mayoría de terrazas y restaurantes, con lo que suele estar muchísimo más lleno de gente que el resto del pueblo y, en nuestra opinión, tiene mucho menos encanto. En el barrio Medio encuentras la Ermita de San Antonio y de la Virgen de las Nieves y, en la calle Posadas 20, un “tinao” tradicional decorado con otros elementos típicos alpujarreños. En el Alto, finalmente, otro río, el Chico, y el mirador “Era el Fuerte”, con las mejores vistas sobre el pueblo.

Tinao decorado en Trevélez, Alpujarra de Granada
Tinao decorado en Trevélez

Pero, como mencionábamos antes hablando de la gastronomía, lo más famoso en Trevélez es su jamón, reconocido con Indicación Geográfica Protegida (IGP). Las condiciones climáticas de la Alpujarra en cuanto a altitud, temperatura y humedad le confieren unas propiedades y sabor distintivos. Personalmente nos gustó. Podrás probarlo o comprarlo en muchísimos establecimientos de Trevélez, sobre todo en el barrio Bajo.

Jamón de Trevélez
Jamón de Trevélez

Por el camino de barrio en barrio tienes un entretenimiento extra: buscar las casas de los tres cerditos. Dada la importancia del jamón de Trévelez y, en consecuencia, del cerdo, en el pueblo ligaron éste con el cuento de los tres cerditos y construyeron sus tres casas, cada una en un barrio. La de paja en el barrio Bajo, la de madera en el barrio Medio y la de ladrillo, con el diseño de las casas de la Alpujarra, en el Alto. También, diseminados por distintos puntos de Trevélez, hay figuras de varios animales que deberás encontrar a tu paso por el pueblo: un cerdo, un burro, un zorro, una cabra…

Al pie del Mulhacén vives,
tocando casi los cielos
con aromas de montañas
y el agua de los deshielos.
Esencia de la Alpujarra
es el sentir de tus gentes,
la hospitalidad es tu lema,
paz y sosiego, presentes.
Aquí el corazón se ensancha,
los sentidos se despiertan,
la creación te embelesa…
y el amor, abre sus puertas.
El jamón que nos ofreces
tiene algo muy especial:
se cura con las ventiscas
y es muy grato al paladar.

Los que nos quedaron pendientes: Bérchules y Yegen

Aunque habíamos mirado información al respecto de ellos, no nos dio tiempo a conocer en persona estos dos pueblos alpujarreños. No obstante, te contamos lo que sabemos de ellos por si tú sí puedes incluirlos en tu itinerario porque seguro que merecen la pena.

Quizá el nombre de Bérchules no te suene pero si te decimos que es el pueblo donde se celebra Nochevieja en agosto seguro que este hecho sí lo conoces. El 31 de diciembre de 1994 hubo un apagón eléctrico tan grande que los vecinos decidieron cancelar la Nochevieja y celebrarla en su lugar en verano. Desde entonces cada año unas 10.000 personas se reúnen el primer sábado de agosto desde para festejar su particular Nochevieja veraniega.

En el siglo XIX muchos viajeros extranjeros, fundamentalmente ingleses, persiguiendo el estilo de vida del Romanticisimo (como ya vimos en Ronda) llegaron hasta la Alpujarra buscando coronar las cumbres de Sierra Nevada. Uno de ellos fue Gerald Brenan que se instaló en Yegen e inmortalizó su aventura en la novela “Al Sur de Granada” (ojo que la película homónima se rodó más bien en Capileira y otros pueblos alpujarreños que en el propio Yegen). Actualmente este municipio sigue conservando ese aire tranquilo y recóndito que atrajo a los románticos y que aún hoy lleva a algunos europeos del norte a instalarse aquí, entre sus menos de 400 habitantes.

De hecho se conserva la Casa del ya mencionado Gerald Brenan, que es una más de las típicas de la zona pero con una placa identificativa para distinguirla. Otro artista foráneo, en este caso danés, que vivió aquí es el fotógrafo Van Hanssen: las instantáneas que capturó de la Alpujarra se exponen en el Museo de Fotografía de Yegen (cerrado temporalmente según Google Maps, consúltalo previamente si vas).

Si tienes aún menos tiempo disponible para conocer la Alpujarra que nosotros, nombraríamos como paradas imprescindibles que debes hacer los 3 pueblos del Poqueira, Pampaneira, Bubión y Capileira. Si, por el contrario, dispones de más días para pasar aquí, además de los ya mencionados en este post, puedes acercarte a la Costa Tropical y descubrir más pueblos bonitos como Motril y Salobreña.

Como siempre, te dejamos un mapa (con muchas capas) con todas las localizaciones mencionadas.

Viajera, internetera, cinéfila, inquieta, 2.0

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